Cómo domotizar la cocina de un restaurante

Son cada vez más las personas que buscan optimizar, mediante la tecnología, su hogar o su lugar de trabajo. Las conocidas como casas inteligentes requieren de un sistema domótico avanzado, y ese tipo de dispositivos han comenzado a trasladarse a otros entornos como puede ser, sin ir más lejos, la cocina de un restaurante. No es difícil darse cuenta de que un restaurante es uno de los lugares más estresantes en los que se puede desempeñar un trabajo, ya que éste ha de realizarse de forma prácticamente inmediata, hay que tener puestos los cinco sentidos en cada tarea que se realiza, y, además, los horarios suelen ser bastante cansados por lo que implica el ocio nocturno, especialmente.

Por esta serie de motivos, conseguir que nuestro entorno, es decir y en este caso, la cocina, nos pueda echar un cable para facilitar ciertas tareas puede ser todo un logro. Hasta hace unos años un pensamiento como este era pura ficción, y lo único a lo que podíamos optar era a organizar la cocina de forma que fuese intuitivo y cómodo desplazarse por ella mientras trabajábamos, pero hoy por hoy, gracias a la tecnología, podemos contar con aliados mejores que una buena organización (que no por ello deja de ser clave). A continuación, os explicamos algunos sistemas inteligentes para domotizar la cocina de un restaurante y mejorar, de este modo, tanto vuestra jornada laboral como la experiencia de vuestros clientes.

Sistemas para domotizar la cocina de tu negocio

Uno de los sistemas más recurrentes para hacer de tu cocina un entorno inteligente es el Touch and Grill. Este programa se encarga de medir la temperatura de los espacios en los que cocinas, es decir, el horno, los fogones, microondas, barbacoa y demás. Es fácilmente configurable, por lo que puedes seleccionar la temperatura en la que quieres que deje de irradiar calor, o puedes controlar más fácilmente cuando ha alcanzado la temperatura adecuada para cocinar tal o cual plato. De este modo es improbable que ninguno de los platos salga mal por un despiste.

Otra de las opciones más cómodas para domotizar una cocina de este tipo es instalar puertas automáticas. Hemos contactado con Metalblinds, especialistas en este tipo de dispositivos, y explican que es una medida que se ha convertido en esencial en muchos restaurantes, ya que permite la entrada y salida más rápida y segura de los camareros, que han de llevar un ritmo frenético para atender correctamente todas las mesas. Además, son también configurables, y puedes seleccionar qué tipo de puerta se adecúa mejor a cada tipo de negocio (correderas, batientes, basculantes, etc.). Poder abrirlas sin tener que tocarlas es una ventaja cuando se llevan muchos platos, tanto a la ida como a la vuelta.

Otra técnica de domotización cada vez más demandada es la instalación de pulsadores en la encimera, independientemente del material de esta, es decir, que si cuentas con una encimera de mármol puedes contar igualmente con una pantalla táctil. Este tipo de dispositivos se suelen encontrar en una vitrocerámica, aunque no es este el tipo de fuego que encontramos en una cocina de restaurante, por lo que poder tener la opción de controlar toda la cocina desde la encimera supone también una comodidad mayor (y necesaria) en ese tipo de entorno.

Ventajas de domotizar la cocina de un restaurante

Como ya hemos mencionado anteriormente, la cocina de un restaurante puede resultar un lugar muy estresante en el que trabajar, ya que se trata de una jornada laboral sin descanso en el que hay que estar atento a cientos de cosas a la vez para poder sacar correctamente los platos. Hoy por hoy, la opción de domotizar la cocina de un restaurante es especialmente atractiva porque permite ofrecer un mejor servicio en tanto que ahorra determinadas tareas y perfecciona el trabajo, ya que nos permite gestionar con mayor comodidad y precisión todos los pedidos.

Cabe señalar que instalar un sistema de este tipo es una inversión importante, sobre todo si nos decantamos por una domotización completa. Al fin y al cabo, otra de las ventajas de este sistema es que podemos seleccionar qué necesitamos automatizar, pero no es necesario que hagamos la instalación de todos los dispositivos para conseguir una cocina más cómoda y eficiente. Basta con localizar lagunas o momentos en los que se agradecería una mano extra, y recurrir al sistema que mejor supla esa carencia. Existen muchísimas opciones para optimizar una cocina mediante la domotización, por lo que solo tenemos que escoger las que mejor se adapten a nosotros.