Tipos de placas de cocina

Tipos de placas de cocina

Uno de los elementos que toda cocina debe tener por obligación es una placa donde poder cocinar y hacer los alimentos para la preparación de las recetas que se vayan a degustar en el almuerzo, la cena entre otros platos. Si vas a instalar una nueva para sustituir a la anterior que ya se ha roto o estás remodelando y quieres buscar el mejor modelo, te vamos a hablar de los diferentes tipos de placas de cocina que existen, sus ventajas e inconvenientes y las posibilidades que pueden darte.

¿Qué modelos de placas de cocina existen?

Placas de gas

Se podría decir que son las placas de gas más antiguas y aunque cada vez estén más en desuso, son muchos los cocineros y personas que siguen utilizándolas porque consideran que tienen un toque muy diferente la comida que se hace con fuego que aquellas que no lo hacen de esta manera. La manera de funcionar es por medio de una combustión de gas que se convierte en una llama de color azul. Aunque antiguamente se debía de acercar una cerilla al orificio donde salía el gas, en la actualidad la cosa ha cambiado bastante, ya que cuentan con un encendedor automático integrado, por lo que podrás olvidarte de las cerillas.

Una de las ventajas que puedes encontrar es que el calor se produce mucho más rápido que con otros métodos, como también muchas personas prefieren el sabor de los alimentos cocinados en estas placas de gas, pudiendo incluso hacer pan tostado acercando el pan a la llama, algo que no se puede hacer en otros modelos.

Placas vitrocerámicas

Posiblemente las placas vitrocerámicas sean las más utilizadas hoy en día ya que cuenta con muchos beneficios y además su precio, como podemos ver en la web TodoHogar.wiki es bastante asequible. Entre las ventajas que podemos destacar es que se puede colocar prácticamente cualquier recipiente, ya bien sea aluminio o cualquier otro metal, como también en algunos casos recipientes de barro para hacer una cocción más tradicional. Cuenta con un calor residual una vez que se ha apagado que puede ser usado para mantener la comida caliente mientras se prepara la mesa o incluso mientras se siguen otros pasos.

En el mercado puedes encontrar una buena selección de placas vitrocerámicas desde las que solamente cuentan con una zona de cocción hasta otras que son más grandes que incluyen cuatro y que tienen diferentes tamaños para que puedas elegir el modo de cocinar que prefieras. Quizás el único inconveniente es que el tiempo que tarda en llegar a la temperatura máxima deseada es más amplio que otros modelos.

Placas de inducción

Una de las placas más famosas en los últimos años y que está ganando muchos adeptos son las de inducción. Estos productos cuentan con un modo de uso bastante curioso, ya que utiliza campos electromagnéticos para que se pueda calentar los recipientes. Un punto negativo respecto a esto, es que solo podrás colocar aquellos recipientes que estén creados con materiales ferromagnéticos, porque de lo contrario, no sentirás la comida calentarse, debiendo de cambiar todos los recipientes, ollas y sartenes que tengas en casa por estos productos que por lo general, suelen tener un coste algo más elevado de lo convencional.

Una de las ventajas que aporta es que tienen un calentamiento muy rápido, que nada más entrar en contacto la superficie con la olla, estará a la temperatura seleccionada. De igual manera tienen una eficacia mucho mayor y consume mucha menos energía. Por otro lado, si es habitual que te quemes en casa, con las placas de inducción no te ocurrirá, ya que cuando retires la sartén y toques la zona, la sentirás fría y sin el calor acumulado. Aunque también puede convertirse en una desventaja al no tener el calor residual para mantener los alimentos a temperatura.

Placas mixtas

Finalmente, para aquellas personas que desean tener diferentes tipos de cocción, por ejemplo una o dos zonas de vitrocerámica y una de gas, entonces lo más aconsejable será estos modelos más profesionales. Cabe destacar que uno de los inconvenientes que vas a tener es que tendrás que tener instalado por un lado la corriente eléctrica que le dará potencia a la vitrocerámica pero también la bombona de gas, por lo que puede ser una instalación algo más compleja pero si eres una persona amante de la cocina es posible que te llame más la atención esta modalidad.

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